martes, 26 de marzo de 2013

CORRER EN LUNES SANTO

      Eran las siete y cuarto de la tarde de ayer Lunes Santo. La tarde pintaba un poco desagradable, con viento, algo de frío y una amenaza de lluvia, que invitaba muy poco a salir a correr. Después de no llegar al entendimiento con mi hijo para salir juntos, me dispuse a hacer un recorrido muy habitual, y que consiste en la subida a los depósitos del agua, que desde mi casa y hasta la cima son 4.400 aproximadamente, así que una vez equipado, marcha al cronómetro y a correr.

      En varias ocasiones dude del recorrido, por la escasa iluminación, que como dicen los mayores, era ya entre dos luces, pero peor ha sido otras veces, que he corrido por el campo de noche, me iba yo con venciendo a la vez que corría a un ritmo por debajo de los 5 minutos el mil. La soledad reina en el camino que me lleva al conocido "Pozo de la Rana", y que suele estar muy frecuentado por senderistas y aficionados al running, pero por la hora y por lo desagradable de la tarde "no había ni Dios". Yo corría luchando contra el viento, y las finas gotas de agua que caían sobre mi cara y mi cuerpo, acompañado por la música que suelo llevar y que emite la radio de mi teléfono móvil. 

      Al llegar al "Pozo de la Rana", sentí alguna duda sobre subir o no a los depósitos, pero ya una vez allí, me auto convencí y me dije venga para arriba y así comencé a subir esa dura cuesta, pasito a pasito hasta arriba, disfrutando de la lluvia, la temperatura era suave, el viento al haber girado ya no me daba de cara y así me planto en la cima, donde ya había decidido parar y hacer una instantánea para inmortalizar este momento, aun que no tenga buena cámara mi móvil, al fondo se aprecian unas luces que son el alumbrado de Almagro, el cielo como se ve, más gris no puede estar cargado de agua, el chico como siempre sale igual de guapo, y más ahora que tiene el pelo recién cortado.

      La bajada como suele suceder fue mucho más divertida, el viento me golpeaba por la espalda, corría cuesta abajo, y una fina lluvia cubría el campo como si fuese un manto, lo que me llevó a recordar lo mágico del momento, y las sensaciones que el cuerpo humano puede llegar a percibir en esas situaciones, comprendiendo que en situaciones como la que yo pude vivir ayer, es por lo que las personas se enganchan a este deporte, que los españoles le llamamos "Salir a Correr" y los ingleses bautizaron como "Running".

      Para terminar la tarde, y como solamente llevaba unos nueve kilómetros, complete el recorrido con unos tres kilómetros por la urbanización "de los músicos" y bordeando el Centro de Salud de Almagro, el parque y el Juzgado nuevo, para finalizar entre 12 o 13 kilómetros y un tiempo total de 1 hora y 4 minutos, pero muy motivado para emprender nuevos proyectos y disfrutando de una buena tarde que he salido a correr, aún que la tarde fuese muy desapacible. 

      Por ello al final recuerdas que hasta que termines de correr, no podrás decir que hace buena o mala tarde.


4 comentarios:

Unknown dijo...

Salidas como esas son las que más me gustan, te dejan con una sensación alucinante. Y te das cuenta de la libertad que te da esto de correr.

Abuelo Runner dijo...

Al final una buena ducha y una cenita.. que despues del dia de perros que hacia te la ganaste con creces.. un abrazo amigo.

Unknown dijo...

muy buena salida, estas son las que mas molan.
Aupa km 0

Kilometro Cero dijo...

gracias a todos. La verdad es que fue un entrenamiento fenomenal. Lo que me preocupa es que me esta gustando demasiado salir a correr por el campo entre dos luces y ha veces se me hace completamente de noche, jajajaja.
Un Saludo